Provinciales
Algo está ocurriendo en el conurbano bonaerense causando, por ahora, molestia pero de no resolverse la problemática, podría causar graves trastornos en la salud de las mujeres.
Tanto en capital federal como en el conurbano bonaerense ha habido un crecimiento importantísimo y, por fuera de toda normalidad, de la consulta de las mujeres por infección el tracto urinario (ITU).
La infección del tracto urinario (ITU) comprende un amplio espectro clínico que va desde la bacteriuria asintomática hasta la pielonefritis aguda complicada con sepsis. Tradicionalmente, ella se clasifica en infección urinaria baja, alta y bacteriuria asintomática.
La causante de todos estos trastornos sería la bacteria Escherichia coli. Generalmente a la mencionada bacteria se la suele combatir con antibióticos de amplio espectro (como la Ampicilina, la Cefazolina, la Cefuroxima, la Gentamicina, el Clotrimoxazol, la Ciprofloxazina, etc.), pero está cepa en especial habría desarrollado una resistencia a los mismo, es por eso que, los facultativos médicos están recetando antibióticos de segunda generación.
Pero ante la gran demanda de las medicaciones recetadas, los stocks, tanto de farmacias como de laboratorios de productos medicinales, se fueron menguando hasta agotarse totalmente.
Pero la situación para muchas mujeres se ha visto complicada por la presencia de un factor que nadie había previsto: la traba a las importaciones.
Según fuentes consultadas (droguerías y laboratorios) algunos medicamentos se importan directamente y en otros, ciertos elementos para su elaboración vienen desde afuera. El control a las importaciones aplicado desde la Secretaría de Comercio Interior comandada por el polémico funcionario kirchnerista, Guillermo Moreno, habría retrasado el normal abastecimiento tanto de productos como de insumos; de no mediar una rápida respuesta a la problemática, una simple infección del tracto urinario podría convertirse, por falta de la medicación adecuada, en una patología mucho más grave.
