San Justo: Refugio de animales necesita ayuda

Desde hace 15 años, Silvia Liliana Cicero, ama de casa y madre de tres chicos, realiza una tarea de amor y solidaridad, albergando en su casa a más de 120 perros y 60 gatos de la calle, los cuales alimenta y mantiene de su bolsillo, sin recibir ayuda privada o estatal.

Patricia Dávila
patriciasdavila@gmail.com

“Estoy a favor de los derechos de los Animales al igual que de los derechos humanos. Es la única manera de ser un humano completo”, con esta frase, Silvia enmarca toda su labor que desde hace 15 años lleva en el partido de La Matanza, salvándole la vida a cientos de perros y gatos que en su camino de abandono, merodeando por la calle, encontraron a su ángel protector.

“Estaba en una situación económica complicada, en el momento que empecé con esto tenia como 20 perros, tenia que darles de comer y empecé a buscarle comida en los restaurantes y cuando iba caminando por la calle me iba encontrando muchos perros, me levantaba algún cachorrito, algún perro ciego, atropellado, lastimado, me los llevaba porque lugar tenia, para la comida me iba a un restaurante a las doce y media de la noche y le sacaba la comida que sobraba de ahí, también tuve animales porque se acercaba gente que me decía que habían perros lastimados, o que no los querían mas” relató Cicero.

Entre sus anécdotas de los primeros comienzos en esta tarea de salvar animales, Silvia rememoro como era su lucha para conseguir alimento para sus mascotas, en las cuales no estuvo sola, sino que la compañía de su hija fue de gran ayuda al momento de “reciclar” aquellos desechos que provenían de un tenedor libre chino, donde cedían las sobras del día, “era un sacrificio también buscar la comida porque teníamos que ir las dos a la puerta del restaurante y hasta a veces pelearnos con la gente que iban a buscar las bolsas de comidas, muchos te querían sacar las bolsas”.

A pesar de emprender una labor solidaria, las voces en contra de este acto no se hicieron esperar y dentro de su contexto mas cercano repudiaron su accionar, “en el 2005 o 2006 mis vecinos me hicieron denuncias porque ellos decían que yo tenia 5 o 6 gatos arriba de mi techo a parte de los que tengo en mi pieza, un día me hicieron una denuncia juntando firmas en el barrio, encima las firmas que vi después no eran todas del barrio, había firmas truchas, vino zoonosis a mi casa porque también decían que yo hacia tener cría a mis perros y los tenia en mal estado, con sarna, lastimados, los de zoonosis me miraron los perros, dijeron que estaban en buenas condiciones, estaban castrado y bien alimentados y que la casa estaba en condiciones de limpia, igualmente el olor a caca y a pis siempre van a estar porque hay perros, después que zoonosis me propuso quedarme con estos perros y no levantar mas, no me llegaron mas denuncias por suerte” exclamó Cicero.

“Esto lo solvento todo yo sola, ahora trabajo en la casa de una señora que tiene muchos animales, si por ahí tengo que llevar un perro al veterinario lo pago con mi trabajo, como una operación, la ultima perra que lleve a operar que es dogo que estaba llena de tumores me salio 400 pesos lo publique en Facebook y nadie me ayudo, hay veces que te ayuda y hay veces que no, no te ayudan con una totalidad hay veces que juntan doscientos pesos y vos tenes que poner la mitad, es una ayuda muy buena porque pones menos, hace poco la volví a operar esta perra y el veterinario me bajo cien pesos por todos los casos que le llevo, desde el año 95 que vengo cuidando de perros” agregó Silvia.

Al momento de referirse a los motivos que la movilizan a cuidar de estos fieles amigos de 4 patas, subrayo que “desde chica que me gusta tener perros, siempre tuve animales en ese entonces estaba mi papá y tenia como 7 perros, después que falleció mi papá en el año 92, ahí empezamos hacer desastres porque con mi papa no podía traer un animal así porque si porque me mataba, pero después mi mamá y yo empezamos a traer, por ejemplo levante un perro de raza, un siberiano y lo levantas pensando que vas a encontrar al dueño, pero no aparece, hasta encontré dobermmans puros pero ni apareció el dueño”.

Cabe destacar, que el refugio no recibe ningún tipo de ayuda, sino que el aporte de gente como una joven del barrio, que se acerco a brindar su apoyo, es de vital importancia para estos animales, “yo estoy satisfecha con lo que hago, no me importa nada lo material, si ves mi casa esta destruida, mi casa era muy linda pero no me importa, pero me llevo el amor de ellos, el amor de los animales, hay veces que no puedo sola pero igual sigo por ellos” manifestó la mentora de este lugar.

Para ayudar a Silvia, con la construcciones de caniles donde los perros podrán comer organizadamente, se necesitan la donación de materiales de construcción como ladrillos, arena, cemento, además de alimento balanceado, llamar al : 1558503671.