Número de edición 8334
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Juan Enríquez: “La necesidad te lleva a hacer un montón de cosas”

Lo escuchaste en “No Te Duermas”

Juan Enríquez. Partido político “Camino a la Victoria”.
Juan Enríquez. Partido político “Camino a la Victoria”.

Durante la emisión del programa radial, se dialogó con Juan Enríquez, militante y representante del partido político “Camino a la Victoria” en La Matanza, acerca de sus inicios en su barrio, Villa Palito, su vínculo con Alberto Balestrini y la situación de su mamá frente a la posible quita de las jubilaciones por moratoria.

Por Melanie Aylen Ibarbuden
melanieibarbuden@yahoo.com.ar

Juan Enríquez es oriundo del barrio de Villa Palito y actualmente representa al partido de Victoria Tolosa Paz, “Camino a la Victoria”, en el municipio matancero. Sin embargo, sus inicios se vieron afectados por las dificultades económicas de aquella época y por los problemas que presentaba el actual barrio de Villa Palito.

“Yo era el diariero de Villa Palito. La necesidad te lleva a hacer un montón de cosas y más cuando tenés hijos chicos, porque cuando sos soltero te da lo mismo a dormir. En los barrios juntábamos cobre, hierro y cuando tuve con mi compañera a mi primer hijo, era un desocupado más”, comenzó Juan Enríquez.

Para sumar más información a su historia, según Enríquez, “estuve en la colimba, fui clase 71, la última camada que se hizo y me tocó vivir allí el momento de Semana Santa con el quilombo de Aldo Rico por lo que fueron momentos complicados” y que “cuando salí de la colimba, me encontré sin trabajo, no tenía ningún oficio hasta que en el año 1993, un momento de desocupación, me puse con mi hermano a hacer bolitas de fraile en su casa y hoy tenemos una panadería”.

Asimismo, se refirió a las palabras que suele dirigirles a sus compañeros de militancia y la ayuda que recibió de sus vecinos y comunicó: “Cuando a los muchachos les transmitimos la posibilidad de emprender, nunca tenés todo lo necesario, no existe la cosa ideal. Yo empecé a hacer bolitas de fraile, pan de miga, algunas galletas y ya me organicé. Les vendía a mis vecinos y todo lo que hice fue gracias a ellos, a la comunidad, me cuidaron para que no vaya por caminos raros y me compraban todos”.

Su familia, su gran sostén

Enríquez es el más chico de siete hermanos y, si bien logró todo lo que logró gracias a su voluntad, su familia fue un gran sostén. “Agradezco mucho a mi familia y más a mi mamá, porque yo me crie sin mi papá y hay muchos valores y principios que te dejan tu mamá y tus hermanos. No me gusta contar como para dar lástima, sino para dar ánimo. Balestrini decía ‘tenés que tener ganas de hacer cosas’”, compartió el político.

Según sus dichos sobre su mamá, “ella trabajaba en servicio doméstico en Capital Federal para cinco o seis casas” y puntualizó sobre la jubilación por moratoria: “Da bronca cuando dicen ‘si tenés la jubilación es que nunca aportaste’. Los patrones nunca aportaron para mi mamá y se jubiló gracias a la moratoria jubilatoria. Hoy ella tiene 84 años, ve muy poquito, pero trabajó toda la vida. La moratoria de jubilados hay que seguir sosteniéndola porque hay un montón de personas que la necesitan”.

Retomando su historia, el entrevistado manifestó que “vender diario me hizo conocer el barrio como la palma de mi mano, para mí la política pasa por ahí y le transmito a mis compañeros que lo que hagas, tenés que hacerlo con pasión” y añadió que “yo recorría el barrio vendiendo diarios y salía con y sin lluvia, por lo que conocía todo y me di cuenta que la gente no podía comprar colchones, compraban el diario para buscar trabajo porque la desocupación fue terrible y ahí dije ‘tengo que poner algo para dar crédito a la gente y vender colchones’, así que vendía diarios y colchones con créditos de un peso por día”.

Respecto de la urbanización de Villa Palito, Enríquez comentó algunos detalles: “La urbanización tiene un principio, pero no es de un día para el otro. Si durante cinco años te llevaba el diario todos los días, me veías haciendo bolitas de fraile y te conseguí un colchón, la gente decía ‘ahora te ayudo yo’. Antes no me identificaba en la política pero hoy la gente tiene que creer en la política, no tiene que desconfiar, es lo único que transforma y también transforma a quienes participan. El que hace política tiene que sentir la política como un placer de transformar y ayudar”.

A modo de cierre, se refirió a Alberto Balestrini y, según sus palabras, “cuando yo estaba vendiendo diario, me lo presentaron a Balestrini y me dijo ‘si gano la intendencia, voy a gestionar la urbanización de Villa Palito, pero tenés que comprometerte con tus vecinos a organizarlo’, pero fue difícil y sigue siendo porque el barrio era un asentamiento y muchos no querían cambiar nada y con la situación económica actual es imposible”.

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