Basta con caminar los barrios, yo lo hago a diario, para ver las enormes carencias que tenemos en La Matanza. Nos falta seguridad, prevención, calles asfaltadas, luminarias y limpieza. No quiero dejar de mencionar los hospitales y el esfuerzo que hacen los vecinos para sacar un turno, por el cual muchas veces suplican desde la madrugada por conseguirlo.
Falta un Estado presente para todos y sobre todo para los que menos tienen. Falta previsibilidad y una planificación seria sobre lo que queremos para nuestra Matanza, de acá a 20 años. Nos faltan puestos de trabajo y la pobreza está presente en muchas de las conversaciones que mantengo en las recorridas. Nos falta seguridad y tranquilidad al caminar nuestros barrios.
Días atrás, con el equipo, miramos las rendiciones de cuentas que las distintas áreas municipales publicaron en la web oficial. La Matanza cerró el 2020 con un superávit de $2,2 mil millones, esto quiere decir que sobró ese dinero del presupuesto. Me pregunto ¿No había lugar en donde invertirlo? ¿Acaso no se necesita inversión en seguridad, calles, veredas; en acompañar el difícil momento de comerciantes y vecinos que se quedaron sin trabajo por el cierre interminable que dispuso el gobierno? ¿No necesitan los matanceros que se invierta todo lo disponible, y más, para mejorar el distrito?
Mi indignación no terminó ahí. ¿Saben qué?, mientras salir a pelearla cada día en La Matanza es jugar a la ruleta rusa de la inseguridad, el Municipio pone dinero en el banco para jugar a la timba financiera. ¿Es necesario que el Municipio tenga plazos fijos y bonos mientras las familias tienen que pasar por las calles de barro para salir a trabajar o a llevar a los pibes al jardín? ¿Estas familias merecen que tengamos más de $16 mil millones en el banco sin un justificativo suficiente ni destino cierto?
Todos los días salimos con miedo de nuestras casas para no ser parte de las estadísticas de robo, y ¿tenemos dinero sin ejecutar en el presupuesto? El año pasado La Matanza recibió un fondo por $1500 millones que debía ser destinado íntegramente para fortalecimiento de la seguridad y como resultado tenemos más de 160 denuncias de delitos por día. Por otro lado, ¿cuáles son los avances y logros concretos del Consejo Municipal de Seguridad creado hace un año? Nos cansamos de los grandes anuncios. Los vecinos tenemos derecho a saber qué se hizo o qué se va a hacer con ese dinero para que realmente impacte en nuestra seguridad y calidad de vida.
Pese a esta realidad, hay algo que no nos falta a los matanceros y son las ganas de salir adelante. Vamos a transformar la realidad de nuestros vecinos, de muchos comerciantes que no bajan los brazos a pesar de las trabas que les ponen; de los jubilados que hacen malabares para vivir. De los jóvenes que todavía sueñan con un futuro mejor.
Pero para lograr eso, hay que cambiar, y yo quiero trabajar para cambiar La Matanza. Para dejar atrás la postal de este distrito que tiene todo para volver a ser pujante, seguro y productivo. Que tiene todo para ser el lugar que soñamos. ¡Estoy seguro que juntos vamos a hacerlo!
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