El intendente del Pro, Ramiro Tagliaferro, se retractó en la decisión de realizar el acto en la Base Aérea de Morón. Lo hizo frente al repudio de docentes, padres y organismos de derechos humanos por tratarse de un ex centro clandestino de detención. Sin embargo, minimizó las protestas y las atribuyó a la oposición.
Por: Valeria Virginia Villanueva
villanueva.valeriavirginia@gmail.com
Finalmente, el jefe comunal moronense Ramiro Tagliaferro decidió dar marcha atrás en el traslado del acto de Promesa de Lealtad a la Bandera a la Base Aérea Militar de Morón.
Antes de cumplirse una semana de las manifestaciones de rechazo de maestros de Suteba, de familias de la comunidad educativa, de organismos de derechos humanos y de vecinos en general, el intendente aclaró, con pocas explicaciones en una entrevista a Radio Continental, que el evento que el 22 de junio protagonizarán alumnos de 4° año de la primaria, se hará como desde hace años en la plaza central del municipio.
No obstante, argumentó que la inicial elección de la Base Aérea, ubicada a más de 30 cuadras del centro, era para “no generarle complicaciones al vecino que concurre a hacer trámites en el centro cívico” y en asegurarle “lo fundamental a los chicos” en cuanto a un perímetro de seguridad.
Además, señaló que los detractores de esa decisión hicieron una “utilización política”. Por un lado, apuntó contra los concejales del Frente para la Victoria que elevaron un proyecto de repudio en el HCD porque, según recordó, en la gestión anterior -la de Nuevo Encuentro, con afinidad kirchnerista- también hacían actos en la Base Aérea y nadie se quejaba.
Por otra parte, respecto a las protestas publicadas por padres de la escuela Crear y Ser de Castelar, donde concurren los hijos de Tagliaferro, él las adjudicó a “algunos padres que siguen militando a Página/12” pero aseguró que esas notificaciones “nunca llegaron a la dirección del colegio”.
Por último, al ser preguntado acerca de la señalización del predio de la base como ex centro clandestino de detención, minimizó: “No esta tan claro como en el caso de la Mansión Seré” ya que fue “más que nada un centro logístico, de paso de los equipos de tarea, de todas esas cuestiones”.
Asimismo, indicó que “el predio de la Base Aérea es muy grande”, y no está afectada la zona residencial a la que se mudará en breve su ex esposa, la actual gobernadora de la provincia de Buenos Aires, María Eugenia Vidal.
