El cuerpo votó un cambió y ahora los ediles se juntarán cada quince días y no todas las semanas como era costumbre desde 1983. La propuesta salió con unanimidad de los bloques pero Victoria Tolosa Paz salió a marcar diferencias.
Tras un proyecto de decreto y varias consultas cruzadas, el Concejo Deliberante de La Plata consumó ayer un cambio histórico en su funcionamiento. No sin polémicas, el cuerpo ha decidido romper con una tradición que mantenía desde el regreso de la democracia: ya no sesionará todas las semanas sino cada quince días. El argumento principal de quienes apoyaron la propuesta es que ahora habrá más tiempo para preparar los debates legislativos.
Si bien la iniciativa –y el expediente de la misma- tuvo el apoyo de todos los bloques, la concejala de Unidad Ciudadana Victoria Tolosa Paz salió a mostrar sus diferencias. “Sesionar cada quince días es una vergüenza y un disparate”, dijo sin medias tintas.
La dirigente puso el acento en el momento que tiene lugar esta modificación. “En este contexto de crisis brutal, de una ciudad que muestra indicadores alarmantes en materia de desempleo, la iniciativa es una vergüenza y un verdadero disparate”, puntualizó.
“Desde luego que no lo voté y entiendo que otros concejales también le han bajado el pulgar”, señaló Tolosa Paz y completó: “La situación económica y el consecuente deterioro social requieren del esfuerzo de todos. Trabajar menos, como se propone, es una forma solapada de aumentarse el sueldo”.
Tolosa Paz se preguntó además “con qué cara van a mirar ahora a los docentes, padres y directivos a los que la semana pasada se les prometió una respuesta por las 40 escuelas cerradas, o a los vecinos que en las últimas horas advirtieron por falta de limpieza en arroyos y el riesgo de eventuales inundaciones; la verdad es descabellado”.
“Asistimos a una maniobra distractiva y burda, que viene a plantear una suerte de ´descanso´, a justificar lo injustificable para quienes asumimos una responsabilidad frente a los vecinos y entendemos el trabajo como una forma de vida”, consideró.
Por último, la edil justicialista les recomendó a sus colegas que, “al margen de la decisión que haya tomado cada uno de los concejales en su fuero íntimo, les diría que se arremanguen y se pongan a trabajar”.
Comandada por el presidente del cuerpo, el oficialista Fernando Ponce, la aprobación del proyecto fue exprés y no mereció debate en el hemiciclo. Podría considerarse como una ‘picardía’ aunque desde de Cambiemos advierten que era algo que ya se había acordado.
Fuente: infocielo.
