Con la presencia en videoconferencia del presidente Alberto Fernández, se inauguró el Hospital René Favaloro de la localidad de Rafael Castillo, en La Matanza, cuya construcción había sido frenada por el anterior Gobierno.
En un contexto atípico por la pandemia que azota al mundo, el Municipio más grande de la provincia de Buenos Aires abrió las puertas de un nuevo nosocomio que por decisión de la anterior gestión macrista no se habían terminado las pocas obras que faltaban para su inauguración a fines de 2015.
En rueda de prensa con los medios de comunicación, Espinoza fue tajante en sus declaraciones e inició remarcando la nueva etapa que se inició en diciembre pasado:»Empieza una nueva argentina. Escuché que había que ser libres, pero no podemos ser libres si no tenemos la posibilidad de salvar vidas, de tener justicia social, educación de calidad y poder generar un desarrollo productivo y de trabajo”.
Para el jefe comunal, también nace un nuevo peronismo que “aprendió de sus errores y construyó un gran frente ampliado que construye la Argentina de pie que todos soñamos alcanzando acuerdos a través del dialogo y de saber interpretar los sueños de las nuevas generaciones, la igualdad de género, la igualdad salarial y de acceso a las nuevas tecnologías”.
Sobre el nombre elegido para el Hospital, explicó las razones: “Es toda una declaración de principios, porque todos sabemos que René Favaloro fue un emblema de la medicina argentina”.
Cómo estará compuesto el René Favaloro
Las instalaciones inauguradas cuentan con 144 camas de Internación general divididas en salas para dos pacientes cada unaequipadasy 14 camas de terapia intensiva totalmente equipadas, con acceso a gases medicinales, respiradores artificiales, monitores multiparamétricos, y bombas de infusión, siendo dos de ellas específicas para aislamiento.
También contará con una guardia que atenderá las 24 horas, guardias pediátricas y de obstetricia, seis salas “de shock room”, servicio de diagnóstico por imágenes, laboratorio de análisis clínicos y bacteriología, farmacias de internación y secundaria, diez consultorios externos equipados, y un vacunatorio.
Sobre lo que costó llegar a la inauguración del Hospital, Espinoza recordó que “nosotros tuvimos cuatro años de abandono de un gobierno anterior nacional y provincial, que cerró el Ministerio de salud y lo bajó de rango, que decía que no había que abrir nuevos hospitales en la Provincia y que no había que invertir en salud”.
No volver a repetir el pasado cercano y palabras de agradecimiento
Dirigiéndose a Alberto Fernández, le expresó la necesidad de que no vuelva a haber recortes en sectores claves de la sociedad: “Esperemos que esta sea la última vez presidente, que nunca más en la Argentina un Gobierno de un color político deje de generar el desarrollo de la salud y la educación que empezó otro Gobierno”.
El Hospital fue concebido y programado no solo por su ubicación estratégica sobre la Ruta Provincial 1001, que brinda un rápido acceso para Rafael Castillo y las localidades vecinas de La Matanza, sino también por estar cerca de los límites con los partidos de Morón y de Merlo, por lo que ofrece acceso a la salud de calidad para más de 2.700.000 de bonaerenses.
El jefe comunal puso especial énfasis en agradecer “a todos los que resistieron durante estos cuatro años, a nuestras enfermeras, nuestros médicos y todos los trabajadores involucrados y comprometidos con este Hospital y en especial el de la doctora Gabriela Hamilton, quien estuvo cuatro años acá adentro cuidando este edificio, generando consultorios externos y salud para toda La Matanza”.
Por último, dejó agradecimientos para Alberto Fernández, Axel Kicillof, Cristina Fernández y Verónica Magario por activar las políticas y el presupuesto necesarios que llevaron a terminar el nuevo hospital. Un nuevo gran centro de salud abrió sus puertas.
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