Los profesionales del hospital, están muy preocupados por el problema de inseguridad en el trabajo.
Por Emilio González Larrea.
El miércoles pasado a la madrugada hubo escenas de violencia particularmente graves en la guardia del hospital Diego Paroissien. Familiares de un paciente que falleció, amenazaron a los médicos, a una enfermera le gatillaron con un arma, hubo gritos, insultos, roturas de puertas por parte de los familiares de los pacientes.
Los trabajadores afirman que si bien están habituados a presenciar hechos de cierta violencia en su trabajo diario, esto se está asemejando a lo ocurrido recientemente en el Hospital Santojanni, situaciones que se vienen repitiendo; cabe recordar algunos antecedentes como fueron los casos del Hospital Mariano y Luciano de la Vega , en Moreno donde hubo una feroz pelea entre grupos rivales en medio del hospital, también en el hospital Fiorito, donde la familia de un joven que llegó sin vida a la institución agredieron y amenazaron a los médicos durante 4 horas, o el caso ocurrido en una sala de salud en La Plata, donde una pediatra recibió un golpe en la cara que le lesionó el tabique nasal, por parte de una madre dado que, según ella decía, demoraba en atender a su hijo.
Los profesionales se quejan de que cada vez se hace más riesgoso su trabajo y sienten “que no se cuida la salud de quienes trabajan en la tarea de cuidar la salud de la gente” y remataron diciendo que “nosotros estamos preparados para llevar un uniforme, no un chaleco antibala”.
Anomia como causal de inseguridad
En su relato, señalan los profesionales de la salud, que “el problema es la falta de normas con respecto a la seguridad en el hospital, tanto para quienes trabajan, como para los pacientes que tienen que permanecer internados”. En primer lugar, mencionan, la ausencia de personal de vigilancia en número suficiente y los que hay, sin la formación adecuada para la tarea.; solo hay tres que cumplen esa tarea y son solo orientadores, en cuanto a dar información a las personas pero no tienen incumbencia en la seguridad del lugar. Están con contratos precarios, dependen del Ministerio de Salud, y fueron incorporados al retirarse la policía para situaciones de emergencia de los hospitales provinciales.
Según los profesionales, se necesitarían como mínimo 4 policías por turno para garantizar la seguridad del Hospital. La Jefatura de la Fuerza ha prometido cumplir con este número pero por el momento hay solo uno, encargado de hacer el relevamiento de la situación del lugar.
También señalaron la falta de control en la circulación de la gente, en pasillos y lugares de trabajo específicos del personal, que no se hacen respetar los horarios de visitas, que hay lugares ocupados por personas que vienen y se instalan. A esto se le suma puertas rotas, baños bloqueados, lugares tapiados, el botón anti pánico colocado para emergencias, no funciona, todo esto hace más caóticas las condiciones de trabajo.
Frente a esta situación la Asociación de Profesionales decidió, en su reunión, incluir la inseguridad en sus demandas y solicitar al director del hospital, Dr. Alejandro Royo, una reunión para tratar el tema; reclaman además la necesidad de un presupuesto de emergencia para el nosocomio para atender esta cuestión y otras como nombramientos, sueldos atrasados, insumos hospitalarios, etc.
En otro orden, APUDIPA decidió mandatar a sus delegados para proponer al Congreso de Delegados de la CICOP, la continuidad del Plan de Lucha con un paro activo de 24 horas, donde tomarían medidas para hacer visible la problemática hospitalaria, a pacientes y vecinos de La Matanza.
Paros para los días 9 y 18 del corriente
El congreso de delegados de CICOP llevada a cabo el viernes 5, resolvió la continuidad del plan de acción con la realización de 2 paros de 24 hs en los 78 hospitales provinciales. El primero sería mañana martes 9, con movilizaciones locales y el segundo el jueves 18 con movilizaciones regionales. Estos serían el cuarto y quinto paro de los médicos bonaerenses, desde la paritaria del mes de abril, en la cual la CICOP firmó en disidencia.
Los reclamos principales de los profesionales de salud de la provincia son la reapertura inmediata de paritarias y un Presupuesto de Emergencia para los hospitales públicos provinciales.
