El dirigente gremial destacó la confluencia de las dos CTA en la decisión de llevar adelante una medida de fuerza a nivel nacional, y manifestó su confianza en lograr el apoyo de Camioneros y de otros sindicatos de peso. “Ya no saben de dónde sacarle plata a los trabajadores, porque nos están exprimiendo como a una naranja”, reclamó.
La asamblea conjunta de las dos CTA, la de los Trabajadores que conduce Hugo Yasky, y la Autónoma, que lidera Pablo Micheli, acordaron la realización de una medida de fuerza, mientras esperan el apoyo de la CGT para darle mayor contundencia a la medida.
“Por unanimidad se aprobó hacer un paro general en la primera quincena de junio, en una fecha abierta para poder coincidir con la CGT. Iniciamos de inmediato contacto y hoy vamos a tener una reunión con los compañeros de la corriente sindical, de Camioneros y otros sindicatos”, adelantó Hugo Yasky, en radio 10.
“Hay necesidad de demostrar que los trabajadores no podemos aceptar el techo a las paritarias, el pedido de reapertura se está instalando en todos los gremios porque la inflación va a estar en el 30% y va a superar a la del año pasado y siguen con esta farsa del 15%”, dijo sobre el techo que sostendría el Gobierno en materia de reajuste salarial a los trabajadores.
En cuanto a la fecha en que podría resolverse el paro, Yasky anticipó que se analiza fijarlo para el 12 o el 14 de junio próximos, en virtud de que el 13 se dará tratamiento en comisiones del Parlamento al proyecto que despenaliza el aborto.
Yasky disparó contra la política económica de Cambiemos y sostuvo que “quieren profundizar el ajuste y están rascando el fondo de la olla” porque “ya no saben de dónde sacarle plata a los trabajadores, porque nos están exprimiendo como a una naranja”.
Además reprochó la persecución que a su juicio sufren los trabajadores del subterráneo en virtud de la lucha por la representatividad gremial de los metrodelegados. “No les permiten hacer el pago individual de la cuota en la cuenta de los propios afiliados, parece un régimen totalitario. Fueron a apretar a los bancos de los metrodelegados para que no puedan hacer el aporte a su sindicato”, fustigó.
A su vez, apuntó contra las eventuales modificaciones en los regímenes jubilatorios especiales que planea realizar el Gobierno. Consideró que sería “una bestialidad” hacerlo ya que el régimen especial de los docentes es para evitar el trabajo de maestros a edad avanzada en una profesión que “implica un desgaste extraordinario y se financió históricamente con un aporte mayor” como ocurre con “científicos y bancarios”. “Se quieren embolsar los aportes como parte del ajuste”, acotó.
