Número de edición 8328
La Plata

De a poco, se suman los monopatines eléctricos al complejo tránsito de La Plata

Se transformaron en una alternativa para sortear los densos embotellamientos. Por ahora, los utilizan algunos jóvenes.

De a poco, se suman los monopatines eléctricos al complejo tránsito de La Plata
De a poco, se suman los monopatines eléctricos al complejo tránsito de La Plata

Boom en la capital federal, comienzan a aparecer tímidamente en La Plata. Son los clásicos monopatínes -aquellos en los que andaban los niños varias décadas atrás-, que ahora, en este milenio desbordante de tecnología, funcionan a batería, sin la tracción a sangre, y levantan, según la marca, el modelo y el precio, hasta 30 kilómetros por hora. Para muchos es la gran alternativa al transporte: treintañeros de las afueras del casco urbano dejan el auto cerca de la circunvalación, donde todavía hay lugar para estacionar, sacan del baúl la pequeña estructura, la despliegan y se lanzan por las calles céntricas de la Ciudad. Sin embargo, no son vehículos contemplados en el Código de Tránsito, y entonces motivan alguna polémica.

En la Ciudad Autónoma de Buenos Aires van y vienen, zigzaguean esquivando el tránsito, y avanzan sin demoras, como si el pavimento les perteneciera. Ocurre que son livianas, no ocupan casi espacio, y alcanza con mover la mano para que arranquen y se deslicen. Las scooters, como también se llama a este mini vehículo, ganaron terreno en los últimos meses; tanto es así que parecen competir en ese sentido con el sistema de “Eco Bici”, con la diferencia que ese es un programa del gobierno de CABA, gratuito y con distintas terminales donde se retira el rodado, y el de los monopatines es un servicio pago de alquiler que brindan empresas privadas y que funciona no con las unidades a la espera que las retiren en estaciones fijas sino que pueden encontrarse en las veredas de cualquier calle.

Los barrios porteños donde se pueden encontrar la mayoría de las unidades son Retiro, el microcentro, Puerto Madero, Palermo, Recoleta, Villa Crespo y Belgrano. En general, se los utiliza para trayectos breves, de modo recreativo o como alternativa para circular en zonas de alto tránsito. El servicio en todos los casos tiene un costo de $15 inicial para desbloquear la unidad y comenzar a circular; luego se cobran $8 por minuto de uso. Así, un viaje de 10 minutos tiene un costo de $95 y uno de 20, $175.

Asoman los primeros

Si bien todavía no integran por completo el paisaje del flujo vehicular habitual de La Plata y son como una excepción en medio de autos, colectivos, motos y bicis, los monopatines a batería empiezan a verse montados por jóvenes sobre todo en las calles céntricas, donde es más necesaria una movilidad que eluda los embotellamientos.

No son, precisamente, artículos baratos, y en estos días en particular, como se importan y el dólar sigue en suba y sin anclarse, quienes comercializan los monopatines eléctricos no arriesgan valores. Antes de esta última alza del billete norteamericano los más económicos costaban US$ 700. “Hasta que la economía no se estabilice un poco no podemos hablar de precios”, indicaron vendedores del sector que, a la vez, confirmaron el crecimiento de la demanda en esta ciudad: “Cada vez hay más gente interesada. Tenemos entre 20 y 30 consultas por mes pero como son productos caros en realidad en ese lapso hemos vendido cuatro o cinco, no más”.

Usados por lo general en espacios con distancias medias dentro de predios, como es el caso de un gran número de hoteles resorts del mundo donde los empleados los utilizan para ir de un sector a otro, poco a poco se ha ido extendiendo la modalidad a su uso en las calles. Un poco más masificados, en Estados Unidos, el sistema Uber ofrece un servicio de monopatines eléctricos.

La tendencia confronta, de alguna manera, las normas de tránsito. Igual que los motociclistas y los ciclistas, los “monopatinistas” tendrían que portar un casco y por supuesto que deberían además acatar las mismas reglas viales que el resto de los actores que se movilizan por las calles. En la capital federal, aunque no se cumple de manera generalizada, se exige el uso de la protección en la cabeza.

En la Ciudad su aparición coincide con el uso cada vez extendido de las bicisendas. Es por esas franjas selectivas de la calzada de las zonas céntricas donde es más frecuente la presencia de monopatines, pues ahí sus conductores se sienten más a resguardo de los riesgos viales.

Opiniones encontradas

El uso del monopatín eléctrico genera controversias entre los especialistas en seguridad vial porque algunos consideran que “son inestables, poco visibles” y “muy silenciosos”, y otros creen, en cambio, que “son cómodos para viajes cortos y que hay que poner el foco en la concientización” para un buen manejo.densos

La opinión en contra de la asociación civil Luchemos por la Vida surgió a raíz de la noticia que se conoció a principios de este mes en Londres, donde Emily Hartridge, una conocida youtuber y presentadora de televisión inglesa, murió cuando el monopatín eléctrico que conducía por las calles chocó contra un camión.

Para esa organización, el caso representa un anticipo de lo que ocurrirá con el uso masivo de estos nuevos vehículos urbanos y prevén que aumentará la posibilidad de accidentes de tránsito.

“Los monopatines eléctricos son inestables, poco visibles, muy silenciosos y circulan a velocidades considerables (entre 25 y 30 kilómetros por hora) por todas partes: por las veredas entre peatones, por la calzada y en las ciclovías”, manifestaron desde la organización.densos

En tanto, Pablo Azorín, jefe de Seguridad Vial y Medio Ambiente de FIA (Federación Internacional del Automóvil) para Latinoamérica, dijo que “resulta fundamental que estos vehículos no circulen por la vereda, para evitar atropellos a peatones, pero también debe evaluarse en qué tipo de calles se les permite circulación, y regular los requisitos mínimos de seguridad del monopatín para equipararlos con el resto de los vehículos”.densos

La ley porteña 6.164 (regulatoria del uso de monopatines eléctricos) obliga a los usuarios a utilizar casco y chaleco refractario, e indica que sólo lo pueden conducir personas mayores de 16 años, las que, preferentemente, deben circular por las bicisendas, ciclovías y calles de baja velocidad.densos

Además, en el marco de esa normativa, los usuarios tienen totalmente prohibido circular por veredas, y en cuanto a la condiciones técnicas, los monopatines eléctricos deben estar provistos de frenos y luces delanteras y traseras.

Fuente:El Dia.

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