Se trata de Claudia Vidir Díaz, de 52 años, vecina de la localidad de Isidro Casanova, quien estaba desaparecida desde el martes 15 de marzo y era intensamente buscada por sus familiares.
Por Leandro Bravo
La mujer de 52 años que había desaparecido el 15 de marzo en la localidad de Isidro Casanova, apareció con vida en los pasillos del Hospital Dr. Alberto Balestrini de Ciudad Evita esta madrugada cuando una persona la reconoció por haber visto su rostro en carteles de “Se busca” e inmediatamente dio aviso a la policía.
20 días habían transcurrido desde que, Claudia Vidir Díaz desapareció del radar de sus familiares, pero esta mañana su marido, Gaetano Testa, confirmó a fuentes periodísticas que la señora apareció sana y salva y que, además, no estaba embarazada como se creía hasta el día de su desaparición.
Los efectivos policiales que arribaron al hospital de Ciudad Evita, se comunicaron con el marido, y la hija de Claudia, quienes confirmaron su identidad, a pesar de que la señora al ser alertada por los oficiales mintió sobre su nombre dando a entender que estaba sacando un turno medico de urgencia.
Las autoridades la trasladaron al Hospital Paroissien, para realizarle los controles médicos necesarios, donde, además, descubrieron que la mujer no se encontraba embarazada cómo se presuponía a pesar de que su esposo también sospechaba que ese embarazo era inexistente.
«Yo el día de la desaparición no fui a trabajar, me pedí el día porque creía que mi mujer iba a tener familia. Llevamos a mi hija al colegio 7.10, volvimos, después la fui a buscar a mi hija a eso de las 9, le dije a ella si me acompañaba y dijo que no, que se quedaba, entonces le dije que se preparara para ir al hospital. Cuando volvemos, mi hija me dice que la madre no está. Salí por la zona para ver si había ido al chino o al almacén, y no, ya se había ido», contó Gaetano Testa, esposo de la desaparecida.
El 15 de marzo, día que comenzó la búsqueda de Claudia, su esposo había declarado que ella se encontraba embarazada y que también tenia fecha para un parto programado, fue por eso que la búsqueda se intensificó en los distintos hospitales públicos de todo el partido de La Matanza.
Las dudas empezaron cuando se descubrió que primero un vecino la vio salir de forma normal de su casa el día de su desaparición, y se acrecentaron cuando otra persona la vio dos días después a la madrugada en un hospital, donde la mujer llevaba consigo solo su morral habitual.
La mujer no había llevado prendas extras, ni dinero en efectivo, pero sí contaba con su cédula de identidad y el certificado con las vacunas contra el Covid-19 al día. Se creía que Claudia habría sufrido algún accidente en la vía pública pero ahora la hipótesis mas acertada seria que se fue por cuenta propia.
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