Mediante una intervención barrial participativa, el día 4 de agosto a partir de las 16 horas en la calle Avellaneda al 1500 entre Caseros y Beruti (Ramos Mejía) en forma abierta y comunitaria, se harán presente un grupo de artistas zonales, en conjunto con varios colaboradores para darle vida a este proyecto que busca “generar tiempos y espacios en el mundo de sinergia, unidad, cooperación y buena energía”.
Allí, se ensamblará el primer mural mandala de la serie “Resiliencia” realizado con los vidrios rotos del último temporal desatado en abril de este año, bajo el denominado proyecto, “La Calle de la Vida”.
También se elaborará un mural gigante de pegatinas llamado «El álbum infinito» armado con los diferentes dibujos de niños y artistas, coordinados por Carolina Sosa Repic,y se armará otro mural de azulejos pintados a mano.
Además, se realizara actividades previas, como la preparación de superficies para esta intervención artística con trabajo voluntario de limpieza de postes y fondeado de paredes, en el que desde la organización llaman a todos los interesados en participar el sábado 28 de julio a partir de las 10 hs en la misma calle donde se realizara el mural mencionado.
Estas tareas, son organizadas por el “Grupo de intervenciones urbanas” del Taller Voláre, supervisados por la especialista en artes con vidrio, Paulina Rucco. “Somos un grupo de personas que a través de diferentes técnicas creativas y de participación comunitaria expresamos una cosmovisión positiva y de posible cambio, utilizando como herramienta fundamental la creatividad, expresada de la forma que sea, como derecho de todos para expresarse, salir de la celda… la literatura, la pintura, la vitrofusión, la música, el collage, la danza, la fotografía… y lo plasmamos con intervenciones urbanas de participación comunitaria” así definen su accionar dentro de la localidad de Ramos Mejia”.
En tanto, también dejaron en claro sus objetivos con toda la comunidad “nos reunimos a intercambiar y generar ideas, también a trabajar y a decorar los espacios que necesitan alegría: públicos, hogares de niños, de abuelos…con participación comunitaria; llevamos el arte y el juego a lugares distantes con el objetivo integrar y generar consciencia de UNIDAD”.