Pastoral Social. En el marco de la exhortación del Papa Francisco a fomentar el desarrollo de la integración entre la Tierra, Trabajo y Techo en la vida del Hombre, la Pastoral Social nos invita a participar de la Misa que nuestro obispo, Mons. Eduardo García, presidirá el viernes 25 de noviembre, a las 18:00 hs, en la plaza del Barrio Las Antenas.
Con el pedido de incentivar las «3T», Francisco nos llama a cuidar la única Casa Común a toda la creación: el Planeta Tierra, tan vapuleado por el irresponsable uso de nuestros recursos naturales causando, tal vez, daños irreparables en el ecosistema.
A su vez, nos pide velar por las fuentes del Trabajo que dignifica al Hombre. Sin embargo, el progresivo desempleo margina a una creciente mayoría, arrastrándola a los límites de la dignidad humana, dificultándole el acceso a infraestructuras y servicios básicos como el agua potable. Cuidar el trabajo digno implica necesariamente una Economía justa, que se desarrolla donde el ser humano en armonía con la naturaleza, estructura todo el sistema productivo y de distribución para que las capacidades y necesidades de cada uno encuentren un cauce adecuado en el ser social.
En esta sociedad «descartable», las personas en situación de trabajo endeble son relegadas a la marginación urbana, donde en muchísimos casos no cuentan con un Techo donde cobijar a su familia, núcleo de toda sociedad.
Por esta razón, necesitamos ciudades integradas y para todos. Es preciso superar la mera proclamación de derechos que en la práctica no se respetan, concretando acciones sistemáticas que mejoren el hábitat popular y planificar nuevas urbanizaciones de calidad para albergar a las futuras generaciones.
Jesús dice en el evangelio que aquel que le dé espontáneamente un vaso de agua cuando tiene sed será acogido en el reino de los cielos. Esto implica «las tres T» pero también el acceso a la educación, la salud, la innovación, las manifestaciones artísticas y culturales, la comunicación, el deporte y la recreación. La deuda social y la deuda ambiental con los pobres de las ciudades se paga haciendo efectivo el derecho sagrado a las «tres T»: tierra, techo y trabajo.
Con este llamamiento, el Papa Francisco nos invita a renovar el impulso misionero, tomando iniciativas frente a tantas injusticias, involucrándonos con los problemas de nuestros hermanos, acrecentando la solidaridad con los más desfavorecidos y tendiendo puentes que nos ayuden a construir en la diversidad para restablecer y fortalecer nuestros lazos sociales.
