Un nuevo local se suma a las opciones de vestimenta que ofrece el partido matancero, más específicamente Ramos Mejía, uno de los centros más asistidos de la zona en cuanto al abordaje gastronómico y de moda que propone. Una opción diferente a las formas que los ciudadanos están acostumbrados, no solo en contenido sino porque su valor principal es la amistad.
Por: Melanie Martínez
“Le París Femme Boutique”, así se llama el incipiente negocio de ropa femenina para mujeres de todas las edades, inaugurado hace pocas semanas, exactamente a una cuadra de la Estación de Tren del Ferrocarril Sarmiento, ubicado a la altura 146 sobre la extensa Avenida de Mayo, más cercano a la esquina de la calle Belgrano.
“Un día tomando café en Dolido Dolce (un resto de la zona), uno de nosotros tenía la idea de abrir un local de ropa de mujer y bueno, como nos gustan un poco las cosas diferentes, distintas, dijimos ´bueno vamos a hacerlo con una temática¨ y elegimos París porque es una de las ciudades encantadoras, está un poco relacionado con la mujer, con el amor, con la moda, la belleza. Por eso le pusimos así”, arrancó Ezequiel, uno de los dueños.
La ambientación acompaña mucho al nombre del local que eligieron, decoraron, alquilaron, remodelaron cuatro amigos del barrio que unieron sus vidas que parecían distantes a nivel profesional en un proyecto que hoy da sus frutos producto de un buen manejo y elección de motivos que hicieron los socios. “Se dio todo muy rápido, tuvimos la idea, nos pusimos de acuerdo, formamos la sociedad, alquilamos el local, tardamos tres semanas en ambientarlo y hace tres semanas que está abierto.”
Sin ir más lejos, los vecinos lo conocen como “el local de la torre”, porque entre su destacada arquitectura que lo define y sigue la línea designada, hay, ni más ni menos que una Torre Eiffel, el emblema de París, en frente a la vidriera; centro de atención de todo chico, adulto, viajeros que pase por la el lugar, que es una de las esquinas más concurridas donde pasan incluso colectivos que llegan con alumnos de la Unversidad y público de otras zonas.
“Le pusimos vintage, París de los años ´20/´30, pusimos el ícono, queríamos que el ícono del lugar sea la Torre Eiffel, que sea como un punto de encuentro de todo Ramos, que sea un poco la Torre Eiffel de Ramos, así surgió la idea”, agregó en la tarde fría, cada vez más oscura de la city, cuando la periodista salió a sacarle fotos.
En ese momento una nena pasaba de la mano de su familia y comentaba ‘yo nunca me trepé a la torre abuela’ y la señora levanto la vista hacia la cámara y sonrió, entre otros dichos de parejas y amigos. “Un día me puse a contar y en una hora nada más creo que se sacaron de veinticinco a treinta fotos con la torre asique dio resultado. Hay muchas chicas que llaman y dicen estoy en el local que tiene una torre Eiffel en la vereda”.
Los amigos
“Lo loco es que ninguno tiene que ver con el mundo de la moda, de ropa de mujer ni nada por el estilo:” Uno de los socios es Darío Costa, el Contador Público del grupo, que maneja un Estudio Contable; “es el que se encargó de armar la sociedad y hacer todos los trámites, de pagar todas las cuentas y llevar todos los números”. Otro es Javer Giarraca, que tiene una empresa de transporte, “vive hace muchos años en la zona y tiene muchos conocidos, muchos amigos y él es el que consiguió los contactos de la gente que nos provee la ropa, la gente que nos hizo la gráfica, un poco con todo lo que fue el armado del local, el día a día”.
El tercero es Emanuel Hornos, profesor de geografía, que es dueño de un local de artesanías de la galería Gran Rivadavia, que se llama “Secretos del Bosque”, que lleva dos años vendiendo en Ramos Mejía; “Es el comerciante, el que tuvo la idea y él tiene más una visión de comercio local y conoce todo eso”. El cuarto, que gentilmene brindó el espacio para esta nota, es Ezequiel Deláguila, que además es vendedor en un laboratorio: “Yo me encargo más de la parte de marketing y ventas. Nos dividimos un poco así.”
El público
A diferencia de otros locales que apuntan específicamente al ambiente juvenil, Le París ofrece mercadería para un amplio rango etario: “va desde los catorce años más o menos si podríamos decirlo, la adolescencia, hasta tuvimos clientas que nos compraron de setenta, setenta y cinco años. A la mujer en sí, desde que se hace mujer, hasta que es mujer”, expresó muy desenvuelto Ezequiel desde atrás del mostrador.
Vestimenta, carteras, accesorios son algunos de los productos que proponen, y próximamente incorporarán calzado. “Tratamos de satisfacer los distintos gustos, las distintas necesidades, tenemos ropa como para chicas jóvenes que salen a bailar y también tenemos para mujeres que buscan ropa para ir a trabajar, así como también señoras que quieren lucir un buen tapado. Es bastante amplia la gama que tenemos”, reconoció.
Los interesados pueden indagar más información y contactarse con Ezequiel, el encargado de actualizarlas, a partir de las redes sociales Facebook, donde se logean como Le París, mientras que en Instagram suben fotos al usuario Le Paris Femme Boutique, y en Twitter son @Leparisboutique. El viejo recurso del teléfono directo de línea 4469-1034 es otro modo de entrar en comunicación con estos grandes emprendedores.
“Nuestras clientas nos remarcan que tenemos cosas que no suele haber y esto se debe a que traemos ropa importada, si bien tenemos también ropa que se cose acá, en el país, pero en su mayoría es de afuera, tenemos importadores que nos traen ropa. Vemos los catálogos de los importadores y la ropa que está en el país y compramos”, afirmó e indicó que no tuvieron mayores complicaciones a pesar del freno a las importaciones.
Los problemas que si los afectan son las cuestiones que tienen que ver en cuanto a talles, que no dependen de ellos, donde puede haber faltantes, pueden demorar de siete a veinte días, en caso de prendas específicas que piden a reservar cuando se da la oportunidad y los proveedores los aconsejan de determinados trajes.
Los proyectos
“La idea es que esta sociedad se consolide, tuvimos muchos comentarios de afuera cuando formamos la sociedad. Desde que ´las sociedades no funcionan, cuídense, tengan cuidado con quién se asocian, cuando hay plata de por medio puede haber problemas´ pero también nuestro objetivo más allá de formar una marca que tenga varias sucursales y por así decirlo, formar una cadena, nuestra idea es poner la amistad por arriba de otras cuestiones, sin enroscar los códigos ni estafarnos”, cerró.
