El objetivo principal es afianzarse con una fuerte candidatura para las próximas elecciones y todas las medidas que se toman hoy, en el plano financiero, apuntan al mismo objetivo; una reelección en base a los logros de Cambiemos. ¿Qué pasará?
Las encuestas no vaticinan una continuidad para el gobierno de Mauricio Macri y las derrotas del oficialismo en provincias donde parecía tener un apoyo mayor que en Buenos Aires generan aún más preocupación para todo el Gabinete.
En una nueva emisión de “Haciendo Radio” (lunes, miércoles y viernes de 13 a 15), Darío Banga, en esta oportunidad, analizó la cuestión política actual de cara a las próximas elecciones con el modelo económico impulsado por el oficialismo.
“Cualquier analista habla de que el Gobierno fracasó políticamente y que el único poder de fuego que tiene de ahora en más es tratar de llegar a terminar lo mejor posible a su mandato y ver si puede tener una reelección”, manifestó Banga.
En este sentido, el especialista en economía entendió que todas las medidas económicas anunciadas desde la presidencia hasta el momento solo buscan captar votos para las próximas elecciones, pero la credibilidad social, incluso la del mercado, cae en picada.
Como lo había afirmado en otra oportunidad, para Banga los mismos inversores no creen que Argentina pueda pagar la deuda externa y eso se refleja en el riesgo país que hoy tenemos. Además de un dólar que no se aleja de los 46 pesos, inclusive con ayuda del Fondo Monetario Internacional.
De la transparencia a lo oculto
En pos de poder “llegar bien parado” al mes electoral, Banga informó que una nueva medida que, si bien suenan más a rumores, tiene que ver con que van a dejar de hacerse públicas las variaciones de reservas del Banco Central.
“Esto quiere decir que el público ahora no va a saber cuántos dólares se están fugando, o no, o con cuantos dólares cuenta el Estado para hacer frente a una corrida bancaria”, explicó Banga, pero a la vez insistió sobre otro punto:
“El FMI está haciendo lo imposible para que Macri continúe porque rompió un propio acuerdo, el de las bandas a la divisa, que deja intervenir al Gobierno directamente en la banda y, si es necesario, en junio le va a hacer un nuevo desembolso”.
Haciendo una vista hacia atrás, Banga comparó la cantidad de dólares que el Banco Central ponía a vender con la restricción y a cuánto ascendió la suma hoy no cumpliendo con dicho artículo del acuerdo: “Antes quemaba 60 millones del Tesoro, ahora lo dejó quemar 250, hay que analizar lo que va a pasar con esos tenedores de bonos cuando vean que se estén quemando ¿Cómo va a reaccionar ese mercado?”
La falacia discursiva del “nosotros o Venezuela”
Otra de las estrategias de Cambiemos es establecer al kirchnerismo como un igual a la política que tiene el país venezolano de la mano de Nicolás Maduro. Banga, desde su especialidad, comparó datos que claramente no favorecen al macrismo.
“Empeoraron todos los índices económicos. Si bien habíamos tenido una devaluación de la moneda, este Gobierno lo profundizó, pero no solo eso, sino que, es verdad que Venezuela tiene la tasa de inflación más alta del mundo, pero hoy Argentina está peleando entre los terceros, quintos”, aseguró Banga.
Y respecto a comparar al peronismo con el chavismo, el especialista sostuvo que todo forma parte de “una propaganda que tiene el Gobierno, al no tener cuestiones propias para poder demostrar a la sociedad que puede hacer las cosas bien, lo único que hace es comparar el Gobierno anterior con un caos o un fracaso”.
Otra cuestión, agregó Banga, va relacionado con la tasa de interés que hoy el país tiene y que ningún otro, a nivel mundial, ha alcanzado: “Cuando el Gobierno asumió, le echaba la culpa al anterior. Ahora, cuando está terminado su mandato, le echa la culpa al que viene, es exactamente lo mismo”.
Tal parece que la autocrítica no es opción para el macrismo, ni siquiera un real sinceramiento. Por el momento se sabe que la oposición más fuerte es el peronismo y la única forma de atacarlo es diciendo a la sociedad que “vamos a ser Venezuela”.
Qué se viene para la semana
Si bien la semana anterior fue relativamente corta debido al paro del 30 y del 1 de mayo, esta promete ser caliente ya que se esperan los nuevos índices de inflación correspondientes al mes de abril.
Banga vaticinó que los valores rondarán los mismo que venían dándose desde principio de año, es decir, un aproximado del cuatro por ciento. Esto, para él, va a preocupar tanto a la sociedad como a los inversores.
“Vamos a estar, si esto se da, casi cerca de un 20 por ciento de nivel inflacionario en el primer cuatrimestre del año. Si continúan estos niveles, vamos a estar de casi un 60 por ciento de inflación anual que con una tasa de interés del 70 por ciento deja de ser rentable y la canasta básica va a aumentar exponencialmente”, concluyó.
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