El escritor independiente pasó por los micrófonos de Haciendo Radio y habló acerca de sus dos textos que fueron presentados en distintas antologías de la Editorial Dunken, su estilo a la hora de escribir y las novedades para el 2020.
Lo metafísico, lo esotérico y lo raro confluyen en el estilo de este escritor que con una relativa corta carrera ya logró que un cuento y una poesía de su autoría vean la luz en una editorial con muchos años de experiencia y varias obras publicadas y avizora para su futuro más material literario y el gran sueño de poder sacar su propio libro.
En una nueva emisión de Haciendo Radio, producción del Diario NCO (lunes, miércoles y viernes de 13 a 15 por AM 850) el entrevistado reveló cómo llegó a publicar sus obras y explicó que “fue a través del programa ROI (Recepción de Obras Inéditas) y la primera oportunidad fue el año pasado en la compilación de Elizabeth Toribio, “Relatos Cotidianos”, me seleccionaron un cuento corto que se llama Quisiera Creer”.
“Este año estuve en la antología poética “La sed del agua”. Es gratificante ser publicado en una época en que todo pasa por las redes sociales y el universo digital. Para alguien que trata de escribir es difícil llamarse escritor”, añadió el entrevistado.
El programa ROI que le permitió publicar sus dos textos recibe todo el año obras de todas partes de la Argentina y países limítrofes de habla hispana. Las convocatorias se abren para los géneros de cuento y poesía una vez por año con la condición de que aquellos escritos que se envíen no hayan sido publicados en ningún otro lado.
Consultado sobre cómo se inspira para la creación de sus relatos, Costa remarcó que “es muy amplio hablar sobre géneros literarios y estilos de escritura, pero si lo tengo que definir basándome en estos dos escritos es que se notan muchos juegos con lo metafísico, lo intrínseco de mi personalidad y mi forma de ser”.
Buscando más allá
Con una mirada simple acerca de la vida, el entrevistado trazó un panorama de cómo la cotidianeidad se filtra en sus creaciones: “Anhelar el ser, conocer, conocerse uno mismo, explorarse, es un poco lo que busco. Desapegarme de lo material, es lo que aplico en la vida diaria. Soy un tipo sencillo que ha tenido la suerte de ser publicado en dos oportunidades”.
Asimismo, complementó su explicación con otro aditamento que se suma a su estilo. “Agregaría el plano esotérico que termina de redundar en lo metafísico y lo raro. Cuando uno muestra lo que tiene en el interior es raro y eso trato de volcarlo mucho en lo que escribo”, se sinceró el escritor.
Sin embargo, para llegar al estilo que maneja en la actualidad, abrevó en muchos escritores que forjaron sus formas y su inspiración: “De Cortázar, Borges y García Márquez emana la inspiración que no es tal, porque la inspiración no es algo súbito que viene y uno escribe, sino que son ideas que vienen conviviendo en mi cabeza”.
Costa reconoció que una de las obras que lo marcó para su camino como escritor fue Rayuela, la novela cumbre de Julio Cortázar, que justamente abreva en temas similares como los son la metafísica y la mirada filosófica sobre la vida.
El momento en que surgen los escritos y la búsqueda de la gran victoria
Desmitificando la idea de que los textos surgen de un momento a otro, Costa planteó que las ideas existen y solo se espera al momento de encontrar las palabras para expresar las sensaciones: “Lo que sí ocurre es que hay un momento en que las puedo expresar en papel. Generalmente no espero la inspiración y sí tengo almacenados elementos que me han brindado estos grandes escritores”.
Por último, se mostró agradecido por poder seguir publicando textos de su autoría, aunque sus planes para el futuro son más ambiciosos. “Cuando uno tiene estas pequeñas victorias uno ve más las cosas como el color de una rosa, aunque me gustaría publicar mi propio libro para dejar de tener estas pequeñas victorias para tener una grande”, concluyó el escritor.
