
La frase corresponde al exdirigente del Distrito, Héctor Echeverría quien, además, sostuvo que el radicalismo “no tendría que desaparecer”, pero también se refirió al sinceramiento que está teniendo la Unión Cívica Radical.
La UCR ha sido centro de toda crítica desde que decidió acompañar y apoyar el proyecto político de Cambiemos y al actual presidente de la Nación Mauricio Macri. Sin embargo, en un contexto en el que el oficialismo cada vez más está perdiendo apoyo, se producen rupturas hacia dentro.
Para Héctor Echeverría lo que está sucediendo “es una crisis de los partidos”, así afirmó en diálogo con “Haciendo Radio”, la producción de Diario NCO que se emite los lunes, miércoles y viernes de 13 a 15 por la AM850.
Desarrollando un poco más, Echeverría indicó que esta crisis es “profunda y sobre todo en el Gran Buenos Aires donde la política ha avanzado al grado de hacerla mediática, de hacerla de otra forma.
Nosotros veníamos de una política de noche a noche, mesa a mesa, barrio a barrio y ahora, con los medios masivos de difusión, la UCR no se pudo adaptar como corresponde”, aseveró el referente radicalista.
En este sentido, Echeverría ratificó que tanto el radicalismo como el partido Justicialista son dos partidos políticos que no deberían “desaparecer” de la Argentina y que deben, asimismo, garantizar la mesa de diálogo “para buscar un consenso”.
El radicalismo dentro del PRO
Ante la pregunta de Oscar Pettinato para el exdirigente sobre qué rol tiene la UCR dentro del oficialismo, Echeverría no solo se refirió a la actualidad, sino que también hizo un repaso a modo histórico para comprender mejor el presente.
“Subestimar la crisis”, “sinceramiento” y antecedentes fueron un poco de los ejes que abarcó:
“La UCR está teniendo un sinceramiento. En la experiencia personal que yo puedo hablar, en el radicalismo siempre se marcaron las diferencias porque si el radicalismo tiene una virtud es que el partido es horizontal; el PRO no vive en la coalición de gobierno como debería, es un partido portuario que pretendió aplicar un verticalismo y por eso tiene dificultades con la UCR.
(…) Estamos viviendo una crisis que nos está maltratando, la teníamos ya con la abrupta terminación del gobierno de Fernando de la Rúa de espalda a la sociedad y ahora hemos quedado en una mortadela de sándwich de un Gobierno que, más allá de las cosas buenas que haya podido realizar, por errores no forzados, generó una crisis económica que debo aclararte que yo mismo subestimé.
No pensé que era de la profundidad del 2001, pero que nos golpeó profundamente al grado de que, para no hablar males de otros, en mi propia actividad cerraron 900 inmobiliarias en la Ciudad de Buenos Aires; estamos mediando para que no se caigan locaciones y las ventas están muy difíciles, prácticamente en pausa”.
Sobre su carrera personal
Cambiando un poco de punto de vista, Echeverría hizo un repaso de profesión como un miembro político de la UCR en el partido de La Matanza:
“Antes la política era inconcebible si no atravesabas un período de formación con los grandes dirigentes. Los grandes dirigentes que a mí me tocó conocer aquí en La Matanza fue el doctor Ignacio Arieta, muy amigo de mi padre. Él me decía ´vos tenés que ser como buen hijo de pillo, el que tome las riendas de la nueva juventud´.
Después, habíamos tenido un gran desencuentro en La Matanza los radicales porque el doctor Arieta, quien compartió el secundario en el colegio san José con Ricardo Balbín, defendió los colores de la fórmula Marini y Lavalle.
Yo aparezco en el partido Emilio (Parodi), me cobija como si no hubiera provenido de la fila del balbinismo y arietismo. Cuando surge renovación y cambio para Alfonsín, el cholo Parodi, que tenía los máximos amigos ahí, opta por darle la opción al Balbin porque creía que se venía Illia y no se equivocó.
Don Emilio Parodi, que fue el tribuno el más grande, el orador de todos los tiempos de la UCR queda como la figura consular del radicalismo detrás de todas las bambalinas y sin ninguna fotografía ni ningún escenario.
Pero ese hombre al que yo le recriminaba en el 83: ´Te quedás encerrado en la pieza Cholo, pero ¿cómo?, que sos amigo de Borrá´.
Él me dijo: ´El día que vos creas que estas con la máxima potencia, que tenés todas las condiciones para llegar espero que a vos te acompañen los Idus de Marzo que traicionaron al más grande de la historia universal, que fue Julio César, que no tengas la desgracia como me pasó a mí de tener tu Trafalgar”
Como yo era intelectual, pero no de esa altura, me puse a agarrar los libros. Trafalgar fue cuando la armada invencible de España con Napoleón quiere vencer al dominio inglés y (Horatio) Nelson, británico, les incendia la flota, muere Nelson y tiene su Trafalgar. Y los Idus de Marzo, como diciendo, ´cuidate de que cuando estés en posición de intentar algo, de quien te rodea”.
Lo intenté, en el gobierno de De la Rúa fui presidente del Distrito que creía que tenía todo para aportar, pero no podía trabajar. La mesa de entrada de la Casa Rosada tenía mas dominio un piquetero que paraba la ruta que un presidente de la UCR de La Matanza.
Gracias a Dios, terminé mi carrera política con el reconocimiento de todas las fuerzas locales, la Iglesia y las organizaciones internas en el año 2016 siendo presidente de los 150 años de la ciudad de San Justo; ahí me di cuenta de que estaba más para volver a la casa que para seguir adelante”.