Podría haber sido un “guanteo” (pelea de exhibición a tres round) sin importancia, pero el del día miércoles 24 de octubre fue algo muy especial para varios de los que nos acercamos hasta las instalaciones del Master de ruta 3, frente al aeroclub de matanza.
Ese día hizo su debut arriba de un ring, el menor de los Pellicciotti; hablamos de Gabriel Pellicciotti de 15 años. Más allá de que Gabriel sea hijo Rubén Pellicciotti del Comedor Comunitario “La Pulguita”, su debut significó algo muy importante y es que: “El deporte cura todo”.
Gabriel Pellicciotti padeció desde su más tierna infancia una enfermedad llamada “Dermatitis Atópica”. La dermatitis atópica, llamada comúnmente eccema (atópico), es una enfermedad de la piel que afecta el cuero cabelludo, la cara y el torso. Se trata de un trastorno funcional de las glándulas sebáceas que producen una hipersecreción de grasa prurito y con aspecto de escamas, más frecuente en niños, multifactorial, en la cuál intervienen factores tanto ambientales como constitucionales. Es de difícil tratamiento y bastante raro en la consulta normal del dermatólogo o del pediatra. Es poco frecuente, aunque suele parecerse a una alergia normal. Es causante de piel rojiza, irritada, escamosa y casposa. Afecta en particular las zonas de la piel ricas en glándulas sebáceas.
Rubén y Lucy (los padres de Gabriel) fueron a cuántos médicos pudieron consultar, padecieron, junto a su hijo, cada erupción que deformaba su rostro, en definitiva, pelearon intensamente para mejorarle la calidad de vida a “Gaby”.
El miércoles 24 de octubre, Gabriel Pellicciotti demostró que la practica deportiva cura muchos males y que la fuerza y el coraje te permite salir airoso de los peores desafíos que te impone la vida.
Junto a su entrenador, Pablo García y su compañero Lucas Vicente, Gabriel Pellicciotti nos brindó una demostración de fuerza, coraje y tesón que nos dejo reconfortados y emocionados.