Luego de una maratónica campaña para conseguir los fondos necesarios para que Ramiro pudiese viajar a China, NCO dialogó extensamente con Mariela Del Prete y Olga, mamá y abuela del “ángel matancero” Ramiro.
Ramiro Ezequiel Fraga, de 3 años y sufre de encefalopatía no evolutiva (Leucomalacia). Nació de 34 semanas y debido a la falta de oxígeno al cerebro se produjo un daño en su parte motriz. A partir de su nacimiento Ramiro, junto a su mamá y su abuela, debieron luchar por todo y para todo, desde una simple medicación hasta un tratamiento que le permita seguir con vida.
Hace un año, la mamá de Ramiro, Mariela se enteró de un tratamiento que se realiza en China con células madres y que podría ayudar a Ramiro a mejorar su calidad de vida. Fue meditando la decisión hasta que hace un par de meses toma la decisión de viajar, pero había un gran obstáculo: el dinero.
Viajar, la estadía y tratamiento implicaba una suma fabulosa de dinero en pesos y, encima todo debía estar en dólares (cosa difícil en estos tiempos).
Pese a todo, Mariela y su mamá, Olga tomaron empuje y se lanzaron a la aventura de intentar lograr lo que parecía imposible.
Más allá de que Ramiro sea moronense, por haber nacido y vivir en Morón, él logró en La Matanza cumplir su sueño. Es bueno reconocer los gestos de los funcionarios cuando demuestran que tienen el corazón en el lugar correcto. Fernando Espinoza, el Intendente matancero, se tomó la molestia de llamar a varios empresarios del distrito para colaborar y de esa manera, se consiguió reunir el dinero necesario para que Ramiro pueda viajar.
Con la ayuda de miles de persona lograron el objetivo y esta es parte de la historia.
“Teníamos un incertidumbre muy grande”
Al comenzar la cruzada solidaria por Ramiro, su mamá, Mariela, le cuenta a NCO que “Esto fue un ir y venir terrible. Había veces que sentíamos que era imposible y, otras, que el sueño estaba al alcance de la mano. Hubieron muchas personas que se acercaron y me decía: vamos hacer tal ó cuál cosa y me daban esperanzas y luego desaparecía.
Al principio se juntaron un montón de personas y había muchos proyectos para recaudar dinero y me hacia ilusiones y pensaba que ya estaba todo, y de repente, desaparecían todos y me quedaba sola y sin nada. Eso me dejaba destruida y me ponía a llorar pensando que nunca iba a poder llegar a juntar la plata” y la abuela Olga agrega que “Al inicio teníamos un incertidumbre muy grande, cuando tomamos la decisión de viajar no teníamos nada y a partir de ahí, comenzamos a llamar a los amigos, a los conocidos, a los medios de comunicación para divulgar la historia de Ramiro y pedir ayuda.
Le dije, vamos a intentar juntar la plata, que Dios nos va a ayudar y así comenzamos. Los que nos abrieron muchos caminos son los muchachos de la hinchada de San Lorenzo, la Butelier, quiénes nos ofrecieron ir a la cancha con las urnas para juntar dinero”.
“Comenzamos a dar a conocer la historia de Ramiro en los programas de los hinchas de San Lorenzo y a partir de ahí, pudimos llegar hacia otros programas” afirma Mariela y nos dice que “Una noche, después de haber ido a varios programas, decidimos con una amiga abrir una página web para Ramiro y fue algo sorprendente, recibimos comunicaciones de todos lados pidiendo una cuenta para depositar dinero y ayudar a mi hijo. A partir de abrir la cuenta era una buena y otra mala, porque día a día me mandaban un resumen de los ingresos y había momentos que crecía los depósitos y otros se estancaba; era así, cuando salía Ramiro en la tele, era impresionante cómo colaboraba la gente”.
“Cuando Fernando me dice que me iba ayudar sentí que ya estaba todo resuelto”
“Roberto (por Politi) fue como un ángel de la guardia, nosotros no lo conocíamos ni teníamos relación de amistad ni nada. Una amiga nos habló de él y le dijimos que le cuente el caso de Ramiro” afirma la mamá de Ramiro y explica que “Roberto Politi tiene un corazón grande como La Matanza. Nosotros golpeamos primero muchas puertas en Morón y no recibimos nada.
Un día lo cruce al Intendente (Lucas Ghi) y le pedí de hacer un festival a beneficio de Ramiro (porque había muchos artistas que querían colaborar) y me dijeron que ellos no podían y me ponían trabas para todo, pero a la vez me llamaban y me preguntaban que necesitaba. Me decía: estos me están gastando, si lo que necesito es la plata para poder viajar con Ramiro”.
Mariela Del Prete nos cuenta que “Gracias a Roberto Politi pudimos reunirnos con Fernando Espinoza, sólo que nos recibiera el Intendente de La Matanza para nosotros era un gran avance. Mira, veníamos de Morón que no nos dieron bolilla y que de repente te llame el Intendente de La Matanza para recibirnos, era algo muy grande.
Nunca pensé que nos iba ayudar de la manera que lo hizo, era una puerta más que abríamos por Ramiro. Pensé que Espinoza nos iba a recibir, iba a conocer a Ramiro y nada más; pero nos recibió el viernes y el sábado ya la gente de prensa nos hizo hablar con más de 10 radios, nos decíamos, Fernando se está moviendo, no lo podíamos creer; sólo con eso estábamos hechos” y agrega que “El día del festival fue algo sorprendente porque no habíamos arreglado nada con respecto a la recaudación de los fondos para Ramiro; nadie nos decía nada, le dijimos si hacemos un sorteo y vendíamos los números y nada, les dije de llevar las urnas para que cada uno aporte lo que pueda y que no, ya íbamos a ver de qué manera se hacia.
Estaba enloquecida, porque se venía la fecha del viaje (teníamos fecha para el inicio del tratamiento) y nos faltaba un montón de plata, no pensé que podíamos llegar a juntar la plata”, Mariela nos comenta a continuación que “Subimos al escenario y estaba la plaza llena, ví toda esa gente y no entendía nada. Cuando Espinoza me dice todo el dinero que recaudaron, me puse a llorar y ya no me acuerdo de nada. Saber que lo tenía a Espinoza de mi lado me dio un gran alivio”.
“Cuando fuimos a ver a Fernando Espinoza, no esperábamos grandes cosas, pensamos que iba a ser una foto y nada más pero nos atendió con una calidez que nos sorprendió, estuvimos más de una hora y media con él” asegura Mariela y añade que “-Cuando fuimos para el festival pasamos por el busto de Evita y Ramiro decía la nena Eva; entonces Fernando nos dice que la toquemos, que nos va a traer suerte. Cuando Espinoza me dice que me va ayudar, me puse a llorar y no podía parar. Con todas las notas y todo el trajín de la cruzada solidaria, uno es como que se pone una coraza y nada te afecta; pero cuando Fernando me dice que me iba ayudar, sentí una cosa extraña, me sentí por primera vez respaldada, sentí que ya estaba todo resuelto”.
El orgullo de ser Argentina
La abuela Olga nos dice que “Hay un colegio en Junín, de gente muy humilde, todavía tenemos las cartas de los chiquitos del jardín que ponían Todos x Ramiro, hacían un dibujo y lo pegaban por el pueblo para juntar tapitas. Hicieron dos viajes trayendo tapitas, entre todos los chiquitos pagaron una combi y nos trajeron miles las tapitas de gaseosas para Ramiro, todo sin conocernos, todo por haber leído la historia de Ramiro por internet.
Les prometimos que cuando volviésemos de China iríamos a visitarlos” y Mariela nos cuenta que “Tenemos que ir a visitar a tantos colegios que colaboraron, tenemos miles de cartas que contestar; es algo que no sabes como explicarlo y a la vez, no sé como hacer para agradecerles a todos la ayuda que nos dieron. La persona que me ayudo hacer la página web de Ramiro, me decía que por todo lo que vivió, por todo lo que sintió al ver la solidaridad palpable de la gente, que le daba orgullo ser Argentino. Todo lo que vivimos no se puede explicar, hay que vivirlo para saber lo que es”.
Mariela recuerda que “La gente de la hinchada de San Lorenzo nos dice que vayamos a la cancha y pasemos con las urnas para ver si podíamos juntar plata. Estaba con la bandera de Ramiro y había una cámara de TV, no sé de que canal y le pido al camarógrafo si me puede enfocar la bandera de Ramiro; en ese momento me ve el intendente de San Lorenzo, Sergio Constantino, me hizo entrar a dónde estaban los jugadores de San Lorenzo, me hizo salir con ellos a la cancha con la bandera de Ramiro y, en el entretiempo, me hizo pasar con la bandera de Ramiro por la cancha. La cancha estaba rellena y cuando empezamos a pasar con Ramiro y con la bandera, fue algo emocionante; ver a toda esa gente que se ponía de pie y aplaudía, hasta la hinchada visitante se paraba y aplaudía. San Lorenzo iba perdiendo dos a cero y la gente estaba re mal, lloraban, iban, venían, estaban enloquecidos, pero cuando salí en el entretiempo a la cancha con Ramiro y la bandera, la cancha estalló, se venía abajo.
No lo podía entender, estaban todos destrozados pero igual le respondían a Ramiro; ese día recaudamos un montón para el viaje a China” y agrega Olga que “Ese día conocimos al Gallego González, que tiene un corazón enorme, se nos acercó y se puso a disposición nuestra y me dice: Abuela anótate mi cel, me llamas para lo que sea. Si tenemos que ir hasta el Vaticano, vamos. El Gallego armó una cena a beneficio con los jugadores de San Lorenzo, nos quedó chico el lugar, se lleno de gente”.
Mariela sostiene que “A pesar de lo demandante que era la cruzada por Ramiro había que seguir con la vida normal, de ir todos los días al jardín, al médico, a rehabilitación y los problemas cotidianos de todas las familias. Fue algo agotador, anduvimos con Ramiro por todos lados” y Olga finaliza diciendo que “Ramiro desde que nació la esta peleando, nunca bajo los brazos. Tuvimos muchos problemas, la obra social no cubre nada, todo lo tuvimos que hacer particular”.
no puedo parar de llorar cuando leo tu historia, mi hijo le diagnosticaron leucomalacia periventricular, tiene un año recien estamos procesando y averiguando que es lo que tiene, estamos pasando por un momento horrible no sabemos que hacer, me gustaria comunicarme con vos para que me cuentes como esta ramiro despues de la aplicacion de las celulas madres, porque en el fleni me dijeron que no vaya que no estaba nada comprobado, como que era tirar la plata. estoy seguro que nos entendes lo dificil que esto y la deseperacion que tenemos te agredeceria tu informacion saludos