Mi Hogar es mi Familia. El pasado sábado 24 de septiembre se llevó a cabo una jornada de trabajo intensivo en la cooperativa «Mi hogar es mi Familia» situada en la Avenida Rivadavia al 17199, de la localidad de Haedo. En el marco del «Programa Prohuerta Familiar” del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria, integrantes del CEPOC y del INTA brindaron una charla informativa, en donde los vecinos participaron del reparto de semillas de la temporada.
La encargada por parte del equipo educativo del CEPOC fue la estudiante Rocío Blanes, quien se encuentra cursando la carrera de Licenciatura en Nutrición de la Universidad Nacional de La Matanza; quién, además de brindar una charla informativa acerca del cultivo y el cuidado de la semilla, realizó un taller instructivo sobre Seguridad y Soberanía alimentaria para todos los vecinos y vecinas de la cooperativa. Durante el taller, contó con la ayuda y colaboración del equipo del INTA, especialistas en economía social y solidaria.
“Es, de esta manera, como desde el CEPOC se busca articular el trabajo entre estudiantes, profesionales y militantes sociales para trabajar en los barrios, con la ayuda de referentes sociales y vecinos, porque entendemos que la educación popular – donde todos ponemos al servicio nuestros conocimientos – es la única manera de empoderar al pueblo y, por sobre todas las cosas, hacerlo consciente de sus derechos”, señalaron desde ese espacio.
La encargada por parte del equipo educativo del CEPOC fue la estudiante Rocío Blanes, quien se encuentra cursando la carrera de Licenciatura en Nutrición de la Universidad Nacional de La Matanza; quién, además de brindar una charla informativa acerca del cultivo y el cuidado de la semilla, realizó un taller instructivo sobre Seguridad y Soberanía alimentaria para todos los vecinos y vecinas de la cooperativa. Durante el taller, contó con la ayuda y colaboración del equipo del INTA, especialistas en economía social y solidaria.
“Es, de esta manera, como desde el CEPOC se busca articular el trabajo entre estudiantes, profesionales y militantes sociales para trabajar en los barrios, con la ayuda de referentes sociales y vecinos, porque entendemos que la educación popular – donde todos ponemos al servicio nuestros conocimientos – es la única manera de empoderar al pueblo y, por sobre todas las cosas, hacerlo consciente de sus derechos”, señalaron desde ese espacio.
