
El pasado 14 de septiembre tuvo lugar en El Triquio, taller del artista plástico Víctor Dabove, el festival de cortos que organizaron en conjunto Marcelo Fernández y Rubén Alberto Paz.
El proyecto, que venían preparando hace unos meses, dio su fruto y tuvo una muy buena recepción. Diario NCO conversó con los organizadores quienes manifestaron su alegría ante la magnitud de este primer encuentro.
El festival de cortos en Hurlingham fue un proyecto que comenzó con una idea simple de reunirse con algunos amigos y pasar algunas películas. Paz, ante esta propuesta que le sugirió Fernández, generó la idea de expandirlo y armar otra cosa.
En la charla coincidieron de realizarlo en forma de festival, donde pudieran armar una buena jornada y donde artistas, que por ahí están fuera de los círculos comerciales y que quizás estuvieran haciendo cosas, pero que no tienen la posibilidad de mostrarlo, tuvieran ese espacio.
Diario NCO: ¿Cuál fue el objetivo de este encuentro?
Rubén y Marcelo fueron muy categóricos, ambos expresaron que, además de brindar un espacio donde nuclear artistas, productoras, directores y presentar sus proyectos, pudieran generar lazos, cruzarse productoras con actores, todo lo que desde un marco organizativo genera estos tipos de eventos.
Y fue lo que sucedió, Paz comentó que llegó gente de El Porvenir, de José C Paz, de La Matanza, de Morón, de Hurlingham, de San Martin, La Pampa, Córdoba, El Saladillo y Lobos.
Y remarcó: “En definitiva lo que buscábamos era que surgieran ideas y de esas ideas hacer otras, es hacer algo por el otro y no quedarse en el chamuyo de que la cultura es, y no hacer nada por la cultura.
“Me ha pasado que me han invitado a encuentros culturales y ver que lo que exponen es totalmente lo contrario a lo que pienso de la cultura, el chamuyo hay que dejarlo detrás de una computadora. Lo importante es hacer, ir, venir, involucrarse realmente, poner el cuerpo, no la cuestión virtual, porque en la cuestión virtual somos todos Gardel y lo importante en esto es estar en cuerpo presente”, añadió.
Diario NCO: En la preselección, ¿cuántos cortos se presentaron y cuáles eran las bases?
Rubén: “No hubo preselección, entraron todos los que se postularon”.
Marcelo: “La base era unos 15 cortos entre videominuto, hasta 15 minutos y hasta 30 minutos. Definimos una base de 15 cortos y lógicamente habíamos puesto un plazo de recepción en el cual fuimos recibiendo el material.
Llegaron desde distintas productoras y realizadores y a los dos meses ya habíamos sobrepasado la base y redoblamos la apuesta, siempre con la intención de seguir sumando más voces”.
Rubén: “Llegaron a ser unos 22 los cortos, de los cuales solo 18 se presentaron a concurso, ya que el resto por motivos personales no querían participar, entonces con Marcelo pensamos en hacerlos partícipes fuera de concurso.
Marcelo: “La idea era no pasarnos de los 25 por una cuestión de tiempo y también por el espacio, de alguna manera estaba limitada a unas 40 a 45 butacas por lo que pensamos en la comodidad de los asistentes”.
Diario NCO: Llegó el día. ¿Cómo estuvo la organización? ¿Cómo se llevó a cabo?
Marcelo: “El placer de todo el proceso de lo que es la organización, con Rubén nos llevamos muy bien. Cada uno sabe el rol que tiene que cumplir y se respeta los tiempos, los roles, la forma de publicar, todo lo que tenga que ver con el enfoque comunicacional.
Además lo que tenemos como particularidad, la buena onda y la buena relación con las personas invitadas. Sucede que en ocasiones que hemos sido invitados algún evento hay como una brecha, una cierta distancia y frialdad del organizador con el público.
En ese punto nosotros le dimos otra mirada, otro enfoque que tiene que ver con el espíritu que nos caracteriza y lo que nos gusta socializar, conocer gente, artistas, involucrarnos en sus trabajos. Todo esto también forma parte de organizar el trabajo de una manera coherente y razonable”.
Rubén: “La organización se dividió en cuatro, cinco bloques, de los cuales cuatro fue todo el evento y muy fructífero, cada bloque fue de una hora aproximadamente y el ultimo solo de media hora.
A lo largo de estos dos meses se fueron sumando amigos como Hugk Heck, quien tocó canciones de su autoría, el D.J. Leinad quien le puso música a l evento y con quien coordiné la parte técnica de los vídeos y el la música.
Me asombró, porque en ningún momento quedó un bache en el medio, cubrir las diferentes facetas del evento y que salga tan copado hasta el último bloque, fue genial.
Además Leinad puso música de los 80, hermosa música bailable que en cada break que se hizo cada hora de cortos, permitió a la gente disfrutar del buffet”.
Diario NCO: ¿Qué expectativas tenían? ¿Cuántas personas asistieron? ¿Se imaginaban una audiencia numerosa?
Rubén: “Las expectativas eran que se conozcan todos, que salga todo bien, que de hecho salió todo muy bien, la gente quedó encantada, hasta el día de hoy sigo recibiendo mensajes de felicitaciones por lo bien que estuvo y se sintieron “.
Marcelo: “Las expectativas siempre hay que controlarlas, manejarlas, porque nos lleva al borde de la ansiedad y los nervios, y en el marco de la organización siempre hay que actuar de una manera concreta, trabajar con todo lo que tiene que ver con la logística y con todo los elementos que van a formar parte del evento.
Con Rubén éramos una especie de guión o pasos a seguir, como para que el evento, en la vorágine de la noche y el interactuar con el público, no se escape nada, por lo tanto nos manejamos de esa manera para brindar un espectáculo agradable donde todos se sintieran cómodos.
Obvio que eso lo vimos reflejado el día del evento, cuando iba llegando la gente y con la que íbamos charlando durante el proceso, y la verdad que ese momento fue muy especial y grato.
También fue muy impactante ver la sala llena, de hecho se ocupó todas las butacas y sillas, además de Rubén y yo hubo personas como Teufel TV quien trajo como una mini tienda de colecciones de cine y cultos, la gente que estuvo en la barra Así que fue un éxito total”.
Rubén: “Se llevó a cabo con mucho esfuerzo, de contactar gente, de involucrarse e incluso de hacerse mala sangre por cuestiones de formatos que venían con los que no correspondía. Pusimos mucho tiempo, que lejos de molestarnos, se pudo llevar a cabo de manera satisfactoria y yo al menos estoy muy hecho con lo que paso.
En cuanto a la asistencia habíamos calculado alrededor de sesenta, no tuvimos un control de eso porque el público se fue renovando, el público de las seis de la tarde no fue la misma que las de las nueve de la noche.
En muchos casos agente que quedó, gente que se tuvo que ir y gente que se sumó, por eso calculamos que fue entre sesenta y setenta las que asistieron en ese ínterin de ir y venir, me refiero que no fue un público estable.
Yo sí me imaginaba esa cantidad, habíamos hecho un cálculo estimativo de los que podían asistir y por privado los que iban confirmando y así llegaban a cincuenta personas “.
Diario NCO: Desde su posición de organizadores, ¿cómo vieron el grupo de invitados?
Rubén: “Al grupo de invitados los vimos muy satisfechos con todo lo que estaba pasando, se sintieron bien atendidos, no les faltó nada, el sonido, la imagen, el confort que se encuentra en El Triquio es único, la pantalla gigante dio muy buena impresión, es decir, es un sitio que se puede ver muy bien cine, es recomendable.
Hasta donde yo pude percibir se sintió un ambiente de hermandad si se quiere, de mucha comunión de gente de cultura, que estaban ahí para verse en pantalla y apreciar que otros los veían y pasarlo muy bien. De hecho la pasaron muy bien”.
Diario NCO: ¿Le fue difícil al jurado la elección de los ganadores?
Marcelo: “En un principio no pensamos en un jurado, sino solo proyecta cortos y entre charla y charla con Rubén surge la idea de hacerlo tipo festival con un jurado, siempre redoblando la apuesta.
Y ambos quedamos de acuerdo que tanto Dabove por su trayectoria, conocido artista plástico amante del cine y la filosofía como Luis Pietragalla que es una persona muy valiosa en el marco cinematográfico de La Matanza, nos pareció buena idea delegar todo lo que respecta a la premiación a la mirada de dos personas con mucha experiencia y trayectoria.
Rubén: “Para nada, y eso me sorprendió, Luis Pietragalla me comunica una semana antes del festival que ya tenían los ganadores y las menciones. En las bases se había anunciado tres premios y tres menciones.
Luis Pietragalla, guionista, director de cine y de artes visuales me contó que cuando el va al Triquio a reunirse con Dabove para decidir quiénes eran los ganadores, cada uno ya tenía su ganador y ambos coincidieron en el mismo.
Marcelo: “Tuvieron charlas y reuniones pero sintieron esa conexión que les permitió de manera unánime coincidir con los ganadores. Y eso fue interesante porque había de todos los estilos, todos los géneros y todos los gustos.
Había ficción, cortos conceptuales, había animación, aventura, había algunos enfoques rupturistas de imagen, en fin había de todo lo que podía ser atractivo, además no era una sola temática rígida y especifica, esto era abierto con temas libres y es por eso que la gente se animó a mostrar su material”.
Rubén: “Quisiera aclarar que si bien hicimos una convocatoria y se presentaron amigos míos como de Marcelo, de ninguna manera manipulamos el resultado final”.
Marcelo: “Sí, como requisitos no quisimos saber, ni tener ningún tipo de injerencia, de alguna manera lo que pretendíamos era recibir la sorpresa de los ganadores el mismo día del evento”.
Rubén: “Ambos técnicamente sabemos algo de cine, particularmente me gusta mucho el cine y veo mucho cine al igual que a Marcelo, pero en este sentido queríamos que esto sea totalmente transparente y que de ninguna manera influimos en el jurado”.