
Juanma Franco vive en Martínez, Zona Norte, y comenzó a seguir a Callejeros en los últimos shows que la banda brindó luego de la tragedia de Cromañón el 30 de diciembre de 2004.
“Cuando fui adolescente empecé a trabajar en los medios radiales y ahí tuve mis primeras experiencias en coberturas de recitales, entrevistas a artistas under y reconocidos. El ambiente musical y de entretenimiento es algo que ahí me empezó a llamar la atención”, aclaró a Diario NCO.
“Banderazos Callejeros” fue el proyecto que creó en base a todos esos momentos, personales y profesionales. En ese entonces empezó a tener la necesidad de querer contar y plasmar sus conocimientos y lo que fue viviendo con la banda. Una vez creada la página, ya tenía las anécdotas necesarias para cautivar a sus seguidores.
“Sigo a los músicos desde los últimos recitales que brindaron después del incidente. El primer show que pude presenciar fue en Villa María, Córdoba, en el año 2008 y en ese entonces, pude admirar el trabajo que realizaban en cuanto a la producción del recital y la música que componían”, agregó.
Un nombre especial que los represente
Cuando comenzó la etapa de juicio, el mismo que debía presenciar la banda, Juanma Franco tenía la necesidad de acompañar a los músicos y demostrarles que no estaban solos. Eran muchos los jóvenes que tiraban para el mismo lado y no había grupo que los representara.
“Elegí que se llame ‘Banderazos Callejeros’ porque nos concentrábamos en los Tribunales o el Obelisco con banderas. Los músicos estaban detenidos y nos manifestábamos con movimientos pacíficos a favor de la banda, también, porque es típico ver flamear banderas en un recital”, manifestó el entrevistado
A su vez, las banderas conocidas también como “trapos”, son un sinónimo de fiesta
en los recitales porque detrás de cada uno, hay historias de amigos que se juntan a preparar uno, sacrificio por la dedicación que lleva, buscar una idea que llame la atención de los músicos y hay diferentes zonas que quieren representar a su barrio en una bandera.
Los primeros altibajos
“La primera traba que tuvimos, fue cuando a la banda se la declara absuelta y al poco tiempo pasan a ser culpables. Con la banda conocí términos judiciales y situaciones que no comprendía hasta ese momento, supongo que fue raro para todos comprender esas decisiones”, agregó.
En ese entonces, lo único que podían hacer como movimiento, era apoyar a Callejeros para que los músicos sientan la compañía de la gente. A pesar de todas las cosas que estaban atravesando, la multitud que seguía a la banda bajo el nombre de “Banderazos Callejeros”, no se rendían.
“Otra de las etapas que nos tocó atravesar, fue la suspensión de los recitales de un día para el otro en los cuales se iba a presentar la banda, no se sabía que pasaba, pero estábamos seguros que algo bueno no era. Desde el momento en que teníamos la entrada en mano ya nos sentíamos en el recital y empezábamos a contar los días, pero la alegría duraba poco», explicó.
La repercusión de Banderazos
En las primeras concentraciones que hacían en Capital Federal mucha gente los acompañó y en la difusión de las redes sociales a nivel nacional, todas las noticias que iban recolectando de la banda las publicaban en la página porque a su vez, el objetivo era difundir todo lo que pasaba con respecto a Callejeros.
“Estefanía Miguel, la mujer de Patricio Santos Fontanet, fue una persona que ayudó a la difusión de la página desde sus redes, me sentí muy feliz cuando vi nuestro logo en su muro, para mí es una persona a la cual respeto mucho y ver su apoyo fue emocionante”, añadió.
El organizador tuvo la oportunidad de conocer algunos músicos como la ex violinista de Don Osvaldo, Estefanía Corsini y Alvaro ‘Pedi’ Puentes, mientras realizaba una volanteada a favor de la banda en Tecnopolís y era algo de no creer porque de verlos desde un recital pasó a tenerlos al lado charlando con él sobre música.
Las concentraciones y la comunicación
“En el momento que absolvieron a la banda, afuera de tribunales se genero un poco de disturbios, había mucha tensión junta de todas las partes. Después siempre en las calles nos manejamos con respeto a la gente ya que, hay opiniones distintas sobre la responsabilidad de la banda y nunca tuve problemas en escucharlas y explicar porque los defendía”, expresó.
Por su parte, agrega que más allá de eso, nunca hubo problemas porque no se acercaban a concentrar personas que pensaran distinto. Asume, que quizás daban miedo por la cantidad de gente que se manifestaba en un lugar y que luego de unos meses, eran muy pocas las personas que asistían.
“Siempre busqué tener una comunicación directa entre los seguidores, aparte de las concentraciones otra de las actividades que se hicieron fue el dar difusión a casos particulares de jóvenes que nos seguían y padecían enfermedades”, resaltó.
Los chicos solicitaban donaciones, pero lamentablemente no se pudo hacer mucho, y el organizador menciona que cuando se acuerda de eso, le genera una angustia muy grande porque eran personas con las que sin duda hoy estarían compartiendo momentos de alegría.
“La comunicación fue cambiando con el tiempo. Dependía de la actualidad y el contexto en el que estábamos ya que, en nuestros comienzos como página, no nos hubiésemos imaginado subir posteos de humor o lo que hoy son memes porque solo informábamos y hasta leíamos varias veces lo que se subía para no generar confusión”, mencionó.
Para finalizar, al creador se le ocurren ideas para sumar a la página porque cree que eso los hará crecer. Manifestó que hoy en día, las redes sociales y las plataformas de comunicación dan posibilidades de que puedan llegar al público de distintas formas y con diferentes proyectos.
Foto: Página oficial de “Banderazos Callejeros”.